La presidenta de Escuelas Católicas, Ana Mª Sánchez, junto con el secretario general, Pedro Huerta y la directora del Congreso, Victoria Moya, clausuraron hoy a mediodía el XVI Congreso “Inspiradores de Encuentros” que ha reunido durante los días 24, 25 y 26 de noviembre en Granada a cerca de 2.000 educadores, directores, titulares y miembros de la escuela católica. En él se ha puesto de manifiesto la necesidad, en este tiempo de incertidumbre, de buscar el encuentro con nosotros mismos y con el otro, para aprender, evolucionar y ser mejor persona.
Ana Mª Sánchez, presidenta de Escuelas Católicas, recordó a los presentes que además de “ser maestros, nos une que somos alumnos y discípulos del Maestro, quien resumió todas sus enseñanzas en una sola palabra: amaos”. Por este motivo insistió en la necesidad de fomentar el encuentro “con nosotros mismos, con compañeros, familias, alumnos, y distintas instituciones”, porque “en el momento actual la educación, el mundo y la Iglesia demanda que nos encontremos, dialoguemos, creemos opinión”. Por su parte, Pedro Huerta, secretario general de Escuelas Católicas, animó al auditorio a poner en práctica todo lo aprendido durante los tres días de Congreso para convertirnos en punto de encuentro. “Es lo que nos toca ahora a cada uno de nosotros, llevar lo que hemos vivido a nuestras comunidades educativas, y no tener miedo a respirar, a ser abiertos para encontrarnos con el otro”, afirmó. Victoria Moya, directora del XVI Congreso, presentó algunas cifras de repercusión de este evento: más de 5.000 fotografías realizadas; más de 500 fotografías en nuestro canal de Flickr y 1.700 visitas; en Twitter, más de 29 millones de impresiones con nuestro hashtag principal (#InspiradoresDeEncuentros) lo que supone 250 mil impresiones por hora y 1.300 imágenes; en Instagram, casi 10.000 interacciones y “me gusta” (81 por hora) con el hashtag principal del Congreso, 170 imágenes, 90 carruseles e innumerables vídeos e historias; más de 3.000 visitas a la página web en los días del Congreso desde 27 países distintos; respecto a la App del Congreso, 1.962 descargas, 1.224 espacios de reunión creados para las reuniones virtuales con los expositores, 6.000 contactos hechos, casi 300 preguntas con más de 1.700 “me gusta” y más de 500 mensajes en el Chat. Moya dijo que estas cifras son el símbolo de que el encuentro es posible. Un encuentro, el XVI Congreso de EC, que desea sirva “como ese impulso que da la caída de la primera ficha del dominó”, en alusión al obsequio entregado a los congresistas, “un pequeño impulso que esperamos haberos dado estos días y que se mueve para crear una bella composición gracias a la colaboración de todos”, y que espera que continúe, dijo. A continuación, dio paso al vídeo resumen del Congreso que recoge todo lo vivido durante el encuentro y se despidió de los asistentes hasta el próximo Congreso que tendrá lugar en 2024. Me encuentro y te encuentro Para ello, dijo que no existía una receta, pero sí que se pueden adoptar hábitos que ayuden al autocuidado: conocerse a uno mismo preguntándose por el sentido de la vida; dormir lo suficientemente; tener una adecuada alimentación; hacer deporte y conectar con Él, con el otro y con nuestros alumnos, porque al conectar con las personas sube la oxitocina, baja el cortisol y aumenta la felicidad. Una felicidad que “no está en el tener o hacer, sino en el ser”. En un mundo hiperestimulado, con menos empatía, menos felicidad y más vías de escape, Rojas recomendó a los profesores que cultiven su voz interior, que eduquen la mirada, vivan con optimismo, más lentamente, reduciendo el consumo de pantallas, evitando las personas tóxicas, siendo “verdaderos modelos y testigos de identidad para sus alumnos”, sin dejar nunca de abrazar. Romper moldes para volver a encontrarnos Respecto a la constante planificación que se desarrolla en las organizaciones para lograr frutos en el futuro, animó a no olvidar cuidar el presente “porque es la oportunidad de la excelencia” y hacerlo a través de la capacidad ejecutiva, la capacidad directiva y el liderazgo. Para Marcet “liderar” es “servir” y no “servirse”, es la suma de “visión y ejemplo”, de “ambición y humildad”. Solo así, según el mismo, las organizaciones se convertirán en “ecosistemas” poblados por “sabios con mucho conocimiento que se relacionan bien con las personas y mantienen su humildad”. Además reflexionó sobre el concepto de “management humanista” como la gestión que pone a la persona en el centro dentro de un mundo definido por la tecnología, y animó a hallar el equilibrio entre el cuidado de las personas y el empleo de la tecnología. El placer del reencuentro En esta ocasión los papeles se intercambiaron y fue la alumna la que, tras agradecer a su maestro Manu Velasco todo lo aprendido y el amor con el que la enseñó, hizo de profesora para preguntarles por el alumnado de hoy, por el futuro de la educación, el alumno con el que sueñan, las nuevas tecnologías y por los valores que necesita la escuela. Para Manu Velasco un buen profesor es aquél que quiere al alumno, es su ejemplo, mira a los ojos, escucha, abraza, ríe y hace reír, vive y deja vivir, usa la tecnología sin olvidar la pedagogía y da valor a su lenguaje interior. “Es más importante escuchar a mis alumnos que enseñarles 1.000 lecciones”, dijo. Una opinión a la que se sumó Jorge Ruiz para añadir que los profesores también tienen que tener espacio de silencio, de escucha, de cuidarse para cuidar al otro. Acompañado por la guitarra de Jorge Ruiz, Manu Velasco terminó esta ponencia recitando una bonita poesía dedicada a la escuela en la que reivindicaba la necesidad de tiempo, tiempo para soñar juntos, enseñar las cosas más importantes, escuchar, confiar, para las caricias, para dar ejemplo… “solo así se puede apoyar, acompañar, amar, aceptar al otro”. El broche final a este espacio lo puso la voz y la música de Jorge Ruiz, Maldita Nerea, quien supo llegar con sus canciones al corazón de los docentes. Toda la información sobre este evento, organizado por Escuelas Católicas con la colaboración del Banco Santander, McYadra, SM, Edelvives, Edebé y Serunión, está disponible en la web del Congreso (https:// |
Sobre Escuelas Católicas
Escuelas Católicas (EC) es la marca de la Federación Española de Religiosos de la Enseñanza-Titulares de Centros Católicos (FERE-CECA) y de Educación y Gestión (EyG). FERE-CECA asocia desde 1957 a los titulares de los centros educativos y EyG los representa en su vertiente empresarial desde 1989. Actualmente integra a 1.959 centros educativos católicos, la mayoría con algún nivel concertado. Gran parte de ellos son centros integrados, es decir, que cuentan con más de una etapa. Si separamos por niveles educativos hablaríamos de 1.747 centros de Educación Infantil, 1.689 de Educación Primaria, 1.633 de Educación Secundaria (ESO o FP Básica) y 776 centros de Bachillerato o FP de Grado Medio o Superior, es decir, de 5.845 entidades pedagógicas. En ellos se educan 1.206.294 alumnos y hay 104.965 trabajadores, de los que 85.592 son docentes. Escuelas Católicas supone el 15% del total del sistema educativo y el 57% de la enseñanza privada concertada, lo que la convierte en la organización más representativa de este sector.
|
Clausura del XVI Congreso de Escuelas Católica: “La educación, el mundo y la Iglesia demanda que nos encontremos”
Comparte el artículo: